La diversidad de su gente es una de sus grandes riquezas y la convierte en una ciudad abierta, dispuesta a compartir la riqueza de su patrimonio, cultura y gastronomía con todos los que la visitan.Salamanca es también Patrimonio de la Humanidad y sus muchos años de historia se reflejan en un casco histórico impresionante. No lo dudes y ven a descubrirla.No te decepcionará en absoluto.